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Por qué votaré este 6D?

Votaré, en primer lugar, porque volvamos a la verdadera esencia de la democracia: el derecho a disentir, a opinar sin miedo, a que los medios de expresión vuelvan a ser verdaderamente libres y no caricaturas incondicionales de un régimen.
Votaré porque la hegemonía política no sea el norte de ningún proyecto, pues la sola idea es totalmente ajena a la pluralidad que caracteriza a las democracias más avanzadas.
Votaré por la alternancia y la diversidad, porque después de diecisiete años de monopolio, el legado es una asamblea de autómatas que aplauden al unísono cualquier propuesta del ejecutivo y que oculta los abusos del poder y se hace cómplice de una incontrolable corrupción.
Votaré por la libertad de tantos venezolanos luchadores encarcelados, cuyo único delito ha sido el pensar diferente.
Votaré por erradicar de nuestro léxico, términos como apátrida, escuálido, pelucón, oligarca y todo aquello que descalifique a nuestros semejantes. Votaré porque todos volvamos a ser simplemente venezolanos.
Votaré por el regreso de la iniciativa individual, único motor efectivo para la generación de riqueza y productividad. Porque cese el odio y la discriminación hacia los más capaces que no comulgan con la filosofía política que se ha intentado imponer.
Votaré porque cese el populismo repartidor de migajas hacia los que no les queda más remedio que convertirse en esclavos, haciéndoles creer que la única salvación está en el líder mesiánico y paternalista.
Votaré en contra de una cúpula militar obscenamente enriquecida a cambio de la fidelidad incondicional hacia quienes se ven perdidos ante tanta impopularidad.
Votaré contra la mentira, arma con la cual se ha querido manipular al pueblo humilde haciéndole creer en enemigos fabricados para tapar la incapacidad y la torpeza.
Y finalmente votaré por el rencuentro de las familias, de los seres queridos y de tantos afectos separados por diecisiete años de odio y resentimiento.


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