Venezuela 2025, la normal anormalidad
Todo es excesivamente normal en esta Venezuela de mediados de 2025. El régimen, cual perro que con sus patas traseras ha echado tierrita a la enorme plasta que quedó luego del putrefacto fraude del 28 de julio de 2024, parece haber concluido su tarea. La oposición aplastada y desarticulada por la represión y el miedo; o por el miedo, que es padre de la represión. Ni en tiempos del gomecismo, la prensa estuvo tan amordazada. Nadie se atrevería a preguntar por el destino de algún prisionero político. Son tantos que sus nombres se diluyen en el sopor del hastío. En la calle, la mitad de los pequeños establecimientos comerciales apenas subsisten, castigados por el bajo poder adquisitivo y las continuas extorsiones de los organismos impositivos que, como en las épocas feudales, expolian a los más débiles para que los señores puedan conservar sus privilegios. Pero ha nacido con fuerza un universo paralelo, digno de "Las Mil y una noches". El de las nuevas cadenas de supermercados...